Valentina Pérez Seguel tiene 3 años, y llegó a la Casa de Córdoba, desde Coronel Moldes, junto a su abuela Graciela por un cuadro de intestino corto.
Apenas nació fue operada de urgencia porque su vida corría peligro. Estuvo internada en el Hospital de Niños de la Santísima Trinidad hasta que, con su alta, ingresaron a la Casa Ronald para seguir con su tratamiento.
«La Casita es muy importante para nosotras, es nuestro hogar«, nos cuenta su abuela. Juntas, están desde marzo de este año, con muchas comodidades y cerquita del hospital.
Valentina es pura alegría. Simpática y extrovertida, le encanta participar de todas las actividades de la Casa. Lo que más le gusta es pintar en la sala de juegos junto a los otros niños con los que comparte y se divierte todos los días.
